Desde tiempos ancestrales se ha trabajado con la mirada y el aliento para enviar energía en forma de deseos o pensamientos hacia otras personas, como se dice los ojos son el espejo del alma. Cuando enviamos energía a través de la mirada y del aliento en el método reiki hablamos de una práctica avanzada que consiste en desarrollar la sensibilidad en los ojos y en el aliento, siempre emanando energía universal con un buen nivel de vibración y sentimientos puros.
Estas técnicas se desarrollan en reiki II y consisten en una serie de ejercicios de meditación y trabajo con la energía, hay muchas personas que nacen con esta facultad desarrollada aunque no sean conscientes de ello.
Lo interesante de este desarrollo es que en una terapia o en otros momentos de nuestra vida nos pueden ayudar como un instrumento más, porque en una terapia nos puede servir si tenemos que tratar alguna zona en la que no podemos imponer las manos, o para eliminar energía residual o estancada, lo maravilloso de la energía es que se mueve por todo el cuerpo y en todas las formas que vemos y tocamos a parte de muchas que no somos capaces de ver o de sentir pero no por ello son menos reales.
Expandamos buenos sentimientos y recibiremos lo mismo multiplicado. Ley de atracción.
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